miércoles, julio 11, 2007

Historias del Autoservicio. Capitulo 13: EL HOMBRE DE LA SIERRA (Parte II)

James del Rosario abre tranquilamente la puerta. Su fuerte brazo izquierdo puede mantener sin problemas la pesada sierra mecanica marca "Palmera". Nada màs entrar, puede percibir como se hace el silencio en el local y la atenciòn se centra en èl. Eso le gusta y sonrie tras su mascara.




James del Rosario nacio en Kansas, provincia de Badajoz, en Australia, en una fecha indeterminada, ya que no quedan documentos oficiales acerca de su persona. Despues de trabajar como cristalero en los laboratorios PalMac (Palacios y Macarrones), se enrolò en el ejercito Bosnio, donde participò en la Quinta Guerra Pùnica que enfrentò a Saharauis contra Yemenies eslovacos, guerra que se iniciò a causa de la publicaciòn en una revista checa de una caricatura del perro del dentista del rey de Turkmenistàn. De esa epoca existe la unica foto obtenida de su persona, algunos dicen que es la ùnica vez que sonriò. Todos creyeron que sufrio muerte en un ataque mexicano sobre tierras austriacas en la batalla antes mencionada. Desapareciò y nunca màs se supo de èl. Hasta ahora.




Del Rosario no tiene tiempo para hacer ni tan siquiera un gesto a los alli presentes cuando un tipo corre hacia èl, se arrodilla y le grita desesperadamente : Llevame contigo, por favor!!. En ese momento James Pelele, el potencial suicida, se levanta con intenciòn de enfrentarse al hombre que ha osado interrumpir su ultima cena, pero Terre le coge del brazo justo cuando pasa por su mesa y lo detiene.



-Què haces tio? Ese tio puede ser peligroso!



James Pelele no tiene tiempo de contestar, ya que en ese mismo instante Del Rosario arranca la sierra mecanica, la deja sonar unos segundos y con un gesto rapido corta la cabeza de Chris Stockolm, el joven que arrodillado frente a èl pedia que le llevara. La cabeza salta cual chapa de Care-Tacker y varios gritos de estupor se oyen en el local. La sangre salpica el suelo recien encerado Por Aretha.



-Mierda- dice està un poco egoistamente.



Alicia Tockneville y Virginia Fox, que estan sentadas en la mesa màs cercana a estos eventos, tienen pensamientos dispares: Alicia piensa instintvamente en la sensacion tan interesante que acaba de sentir: nunca le ha cortado la cabeza ha nadie y de repente siente el irremediable impulso de hacerlo. Es algo que tiene que hacer: definitivamente no puede morirse sin cortarle la cabeza a algun tipo con una sierra. Virginia Fox obvia la tragedia que acaba de ocurrir y sigue fijandose en los zapatos de James del Rosario. Aun no es capaz de saber si son zapatos de Calvin Klein o de Hugo Boch. Y esa incapacidad le asusta: se estara haciendo mayor?



James del Rosario mira a su alrededor, y despues de unos segundos encoge los hombros y dice:

-Bueno, pero, y que? El me lo ha pedido.

Quizas esperando una afirmacion que jamas llega, del Rosario espera aun varios segundos antes de hacer una mueca bajo su mascara y dirigirse a la barra, donde se sienta en un taburete y pide amablemente un cafe a Aretha, aun con gotas de sangre cayendo de su mascara salpicada.



En ese momento Hèctor Rocha, el jefe del local sale de la cocina con dos platos de ensalada con "frutos del desierto". El toque esencial del plato, como el suele decir, es "la pizca justa de arena entre las hojas de lechuga y el zumo de cactus verde". Al ver la escena, se queda momentaneamente parado.



-Wooowwww. Chaval! Pero que carajo ha pasado aqui? Vamonos de fiesta! Que momentazo y me lo he perdido. Ey tio, no te preocupes, esto lo limpiamos nosotros luego, yo te invito al cafe y a lo que quieras! Quien me ha pedido la puta ensalada???



James del Rosario levanta la mano levemente en gesto de agradecimiento mientras Aretha le sirve el cafè. Instantes màs tarde, Stefanep, que no puede aguantar la tensiòn que se vive, se levanta temblorosamente y se pone a gritar como una adolescente delante del cantante que le produce mas orgasmos cuando se toca en el servicio, en esos instantes previos a irse a la cama, cuando cree que su madre no le escucha... y se equivoca. Por que una madre atenta sabe lo que su hija hace siempre, y se siente defraudada porque su hija no folla tanto y se tiene que masturbar pensando en un cantante afeminado. Que verguenza.



-Por favor, por favor! -grita Stefanep- Oye tio, mira, dejanos salir, vale? solo a este tio y a mi -mientras indica con el dedo a su amigo Hertem Troms, que sostiene inquieto entre sus brazos el cambiador de materia- Este tio acaba de inventar una cosa que va a cambiar el mundo, macho. Tienes que dejarnos salir!!! Hazlo por la humanidad, tio!



Del Rosario escucha pacientemente todo lo que Stefanep le cuenta. Cuando calla, toma un par de sorbos del cafè. Como lo hace a travès de la mascara todo el cafe cae derramado y le gotea en los pantalones. Deja la taza sobre el plato, se dirige unos instantes a Aretha y le dice: "Muy rico". Luego se levanta lentamente del taburete, coge la sierra, la enciende y se dirige hacia la mesa numero siete ocupada por Troms y Stefanep.



-Asi que un invento que cambiarà el mundo, no? -dice con voz ronca y misteriosa James del Rosario.



El ruido de la sierra mecanica hace que Stepanef no se entere muy bien

-Como?

Del Rosario carraspea, se acerca un poco a Stefanep y alza la voz, intentado que le oiga mejor.

-Decia que "asi que un invento que cambiarà el mundo, no?". Es esta sierra, hace mucho ruido.

-Ya veo, ya, les podrian poner un silenciador o algo. No se. Pues si, es un invento revolucionario.

-Y de quien es el invento?

-ah! de aqui mi amigo Troms, es un genio!

James del Rosario ataca rapidamente el cuerpo de Hertem Troms, que antes de darse cuenta tiene el cuerpo partido en dos. Antes de su ultimo suspiro, tiene tiempo de decir: "Me cago en tus muertos, Stefanep". Los gritos vuelven a oirse, Hector Rocha intenta sacar fotos con su movil pero no le queda bateria. Alicia Tockneville esta poniendose realmente cachonda, mientras Nika Talbot intenta concentrarse en si el tipo que tiene delante es su hermano Masturbatori o el otro "yo" de una dimension desconocida.

-Repito -dice del Rosario- Y de quien es el invento?



Todo el mundo calla. La sierra ruge cada vez mas fuerte.



-Tuyo tio! -grita Terre, que aun tiene que sostener a James Pelele, que quiere avalanzarse sobre el asesino- El jodido invento es tuyo! Pero deja de rebanar al personal.



Màs allà de la barra Aretha no puede dar credito a lo que ven sus ojos. Acaban de contemplar dos asesinatos, una situacion traumatica vivida en grupo, y sin embargo su jefe intentar sacar fotos del evento, el tio que comia grasa y bebia ron a palo seco esta intentado ir a por el tipo de la sierra, las dos mujeres que antes la insultaròn racialmente, una no hace mas que mirarle los zapatos y la otra tiene una mirada lasciva completamente indescriptible. Y para colmo la mujer enchaquetada que hasta ahora habia permanecido impasible se levanta, con una cucharilla en la mano, y se enfrenta al asesino.



Y asi es, Nika Talbot lentamente se alza de su asiento, y con las piernas semi abiertas, en una posiciòn clara de duelo westerniano, permanence de pie, a unos diez metros de James del Rosario. Con una cucharilla en la mano. La tensiòn se masca en el ambiente, una bola de pajitas de colores pasa por el pasillo impulsada por el viento. Algo va a pasar. Nika mira fijamente a su adversario.



-Mira como lo estas poniendo todo -le espetà- ya podias ir parando de hacer el payaso, no?



James del Rosario permanece unos momentos callado. Se oye su respiraciòn chocar con la mascara. Despues se rie para si mismo y mira a los demàs.



-Ostia, chavales, paerece que nos vamos a divertir, no?



Nadie contesta. En ese momento se escucha un sonido. Nika Talbot acaba de dejar caer la cucharilla de cafè al suelo.



Ostias -dice Pasto casi en un susurro- Mira la tia, sin cucharilla ni nà.